lunes, junio 24, 2013

La Maldición...

La historia que voy a contar, quizás de origen turco, es de una gran sabiduría:
En una pequeña y pacífica aldea, vive un sabio. Un día, de pronto, todas las gallinas caen muertas. Entonces los aldeanos van a ver al sabio y le preguntan:
-¿Qué dice usted de esto, es una maldición?
-No -responde el sabio- es algo bendito. No puedo decirles por qué, pero es para nuestro bien. Los aldeanos se van refunfuñando, diciendo que el sabio ya envejeció demasiado…. Al día siguiente todos los perros se desploman, paralizados. Los aldeanos regresan a ver al sabio.
-¿Y ahora, díganos, esto es bueno o es malo?
-¡Es bueno!
Al tercer día, todos los fuegos se apagan. No funcionan las cocinas, ni los hornos para el pan, ni las calefacciones, no pueden encender una antorcha. Corren otra vez a la choza del sabio.
-¡Ahora sí que es verdaderamente una maldición!
-¡No, es para nuestro bien!
- ¿Cómo puede decir que es bueno que nuestras gallinas mueran, los perros se paralicen y los fuegos se apaguen? ¡Se ha vuelto loco, ya no creemos en usted! En ese momento una banda de bandidos pasa cerca de la aldea. Todos los aldeanos se aterran pensando que serán robados. Se ocultan reteniendo lo más que pueden su respiración. Pero el jefe de los ladrones observa las calles vacías y dice: “No hay gallinas, no hay perros, no sale humo de las chimeneas, aquí no vive nadie. Vámonos”…. Y es así como los aldeanos se salvan de una muerte segura.
A veces nos suceden cosas que sentimos como una catástrofe.
Sin embargo, cuando tienes una gran pérdida, el mundo te da un bien mayor que no esperabas. La perdida y lo obtenido se equilibran. Pero, si no estás en la vía espiritual, todo lo que te sucede te parece totalmente nefasto, a semejanza de los aldeanos del cuento.
Si te privan de algo, pregúntate si no eres tú quien ha provocado esto, y dirás que, quizás eso sea para tu bien.
Así como los aldeanos pierden a sus animales y su fuego, nosotros, que vivimos en una época difícil, estamos perdiendo antiguas amarras que nos daban la seguridad. Estábamos atados a unas costumbres, a una moral religiosa, a una cultura, a unas ideas políticas, a un sistema económico. Todo esto nos ha decepcionado. El mundo ha entrado en crisis. Y los individuos también. El mundo, con sus leyes caducas, no nos pide nuestro parecer. Quienes acaparan el poder, no nos dejan ser lo que somos, nos obligan a ser lo que ellos quieren que seamos. Debemos luchar y trabajar para enriquecer a las grandes multinacionales. ¿Es esto una maldición? ¡No, es para nuestro bien!
Así como el gusano se retuerce para dar origen a una mariposa, la situación actual, donde hasta el planeta se menea, nos propulsa hacia un despertar inminente de la conciencia.
Aprendemos a ser libres, a desprendernos de todo lo que no es auténtico: osaremos demoler los límites inculcados en nuestra mente por culturas que durante siglos han vivido impidiendo el cambio, la mutación, para así, en nombre de la tradición, intentar esclavizarnos. Entre la dispersión subjetiva, pensar una cosa, amar otra, desear otra y hacer otra cosa, elegiremos la unidad, para así gestarnos a nosotros mismos, aprendiendo a amarnos liberados del Yo, reconociendo que somos una obra divina. Entonces, sin jefes bufones, seremos dueños de nosotros mismos, con confianza total en nuestro destino, en la unión con todos y en la aceptación como única patria al Planeta Tierra.
Alejandro Jodorowsky

jueves, junio 20, 2013

El Misterio de la Muerte de René Descartes

Fue uno de los protagonistas y porque no fundador de la filosofía moderna, vivió en el S XVII, época en que la razón era protagonista por sobre las cuestiones místicas y religiosas. Mediante sus meditaciones y su método intentó dar respuesta al escepticismo reinante. Su teoría no fue el rechazo o la negación de la duda sino su aceptación hasta las últimas consecuencias. Es decir, utilizó la duda como método y sometió todo conocimiento a duda con el fin de encontrar una verdad de la que ya no pudiese dudar ni el más escéptico. Pero no estamos aquí para hacer un análisis de su pensamiento, sino el de un rumor que comenzó a tener firmeza poco después de su muerte. ¿Pudo Descartes morir asesinado por sus rivales intelectuales?

Formación Intelectual

Descartes nació el 31 de marzo de 1596 en La Haye, en la Turena francesa. Pertenecía a una familia de la baja nobleza, siendo su padre, Joachin Descartes, Consejero en el Parlamento de Bretaña. La temprana muerte de su madre, Jeanne Brochard, pocos meses después de su nacimiento, le llevará a ser criado en casa de su abuela materna, a cargo de una nodriza a la que permanecerá ligado toda su vida.
A los ocho años, fue enviado a un nuevo colegio, fundado por el rey Enrique IV en La Flèche, una aldea 105 km al noroeste de La Haya. En esta escuela, que posteriormente se convirtió en la mas celebre de Europa, fue supervisado en su preparación humanística por jesuitas y estuvo bajo la tutela del padre Charlet, un pariente lejano que se convertiría en su "segundo padre" Durante los 10 años que pasó en La Flèche, René estudió a los autores clásicos griegos y latinos, adquirió práctica para escribir en francés y latín, estudió música y artes dramáticas e incluso dominó las caballerescas artes de la equitación y la esgrima. Al crecer, se interesó en la ciencia, cuya enseñanza no era otra cosa que las teorías de Aristóteles, de 2000 años de antigüedad, reinterpretadas por académicos medievales. Pero en la escuela jesuítica también se impartían los más recientes avances en matemáticas y astronomía.

El joven tenía una sed insaciable de conocimientos y poco después se vio a sí mismo en el límite del conocimiento de su época. Al descubrir errores y contradicciones en las enseñanzas de sus maestros, rehusó aceptar los enormes y graves vacíos en el mapa del conocimiento como si fuesen dictados por Dios. Luego de otros dos años en la Universidad de Poitiers, finalmente se tituló en leyes en 1616. Ahí terminaron los estudios formales del joven Descartes, pero rehusó ejercer la profesión de abogado y tampoco se sintió satisfecho con la vida contemplativa del académico. Así, anunció su plan de buscar el conocimiento viajando, observando y aprendiendo de lo que llamó "el libro del mundo".

Después de sus estudios opta por la carrera de las armas y se enrola en 1618, en Holanda, en las tropas de Maurice de Nassau, príncipe de Orange. Allí conocerá a un joven científico, Isaac Beeckman, para quien escribe pequeños trabajos de física, como "Sobre la presión del agua en un vaso" y "Sobre la caída de una piedra en el vacío", así como un compendio de música. Durante varios años mantienen una intensa y estrecha amistad, ejerciendo Beeckman una influencia decisiva sobre Descartes, sobre todo en la concepción de una física matemática, en la que había sido instruido por Beeckman. Continúa posteriormente sus investigaciones en geometría, álgebra y mecánica, orientado hacia la búsqueda de un método "científico" y universal.
La noche del 10 de noviembre de 1619 tiene tres sueños sucesivos que interpreta como un mensaje del cielo para consagrarse a su misión filosófica. La importancia que concede Descartes a estos sueños choca con las características que se le atribuyen ordinariamente a su sistema ( racionalismo), pero según el mismo Descartes nos relata, estarían en la base de su determinación de dedicarse a la filosofía, y contendrían ya la idea de la posibilidad de fundamentar con certeza el conocimiento y, con ello, reconstruir el edificio del saber sobre cimientos firmes y seguros. Habiéndose dotado con su método de una moral provisional, renuncia a su carrera en el ejército. De 1620 a 1628 viaja a través de Europa, residiendo en París entre los años 1625-28, dedicando su tiempo a las relaciones sociales y al estudio, entablando amistad con el cardenal Bérulle, quien le animará a desarrollar sus teorías en afinidad con el catolicismo. Durante este período se ejercita en su método, se libera de los prejuicios, acumula experiencias y elabora múltiples trabajos descubriendo especialmente en 1626 la ley de refracción de los rayos luminosos. También en esta época redacta las "Reglas para la dirección del espíritu", obra inacabada que expone lo esencial de su método.

"Pienso, luego existo"

En 1633 Descartes terminó el primer borrador de una extensa obra que se titularía Le Monde (El Mundo). Pero entonces recibió la noticia de que el astrónomo Galileo había sido condenado por la Iglesia Católica en Roma por adherirse a la teoría de que la Tierra gira alrededor del Sol, la cual Descartes apoyaba. Dejó de lado su manuscrito y durante los siguientes tres años escribió el libro en que definió su método científico en una forma que fuera aceptable para los teólogos eclesiásticos. En una época en que casi todos los libros académicos se escribían en latín, Descartes publicó el suyo en francés, con el título de Discours de la méthode (Discurso del método). Pero su cita más famosa se conoce en latín. Es su sonora demostración del poder de la mente: Cogito, ergo sum (Pienso, luego existo).
El Discurso de Descartes de 1637 postuló cuatro reglas para la investigación científica: 1) no dar por cierto algo que no parezca evidente, 2) dividir un problema en el mayor número posible de partes, 3) buscar primero soluciones para los problemas más simples y preceder paso a paso con los más complicados, y 4) revisar las conclusiones para asegurarse de que no hay omisiones.

El método de Descartes fue una doctrina revolucionaria en una época en la que se esperaba que el científico o filósofo respaldara sus teorías con citas de la Biblia o de obras eclesiásticas, y pronto tuvo muchos adversarios. Pero también tuvo importantes partidarios, entre ellos la reina Cristina de Suecia, que obtuvo las obras de Descartes por medio del embajador francés en su corte, e inició una correspondencia con él en 1647. Cristina heredó el trono a la muerte de su padre, Gustavo II Adolfo, cuando tenía seis años. Mientras que un regente gobernó el país a su nombre, Cristina fue educada en un medio rural alejado de la corte, pero se le dio la educación que normalmente se impartía a los jóvenes. Se prohibió a los extranjeros asistir al funeral de su padre, "para que no sepan de nuestra pobreza", explicó el concilio gobernante. Coronada a los 18 años en 1644, Cristina decidió corregir la desfavorable imagen que tenía Europa de su país.

La joven reina hizo de su corte el centro del arte y el conocimiento del norte de Europa, trayendo músicos y artistas de Alemania e Italia. Pero la estrella de este firmamento intelectual fue Descartes. La reina decidió atraer al académico francés desde su autoexilio en Holanda y nombrarlo filósofo residente de su corte en Estocolmo. Descartes, de 53 años, cedió con renuencia ante la insistencia de Cristina, y en el otoño de 1649 abordó un barco rumbo al que llamó Suecia.
Las madrugadas educativas, el invierno y la muerte.

Recibido ceremoniosamente en Estocolmo, Descartes fue asignado para escribir versos en francés para un ballet. Pero su principal obligación fue ser tutor de la reina, con una particularidad, la reina le cita en palacio cada mañana a las cinco de la madrugada para recibir sus lecciones. Descartes, de salud frágil y acostumbrado a permanecer escribiendo y leyendo en la cama hasta media mañana encuentra en esta obligación algo muy difícil de sobre llevar, por su parte su estudiante real resultó ser aplicada pero poco ilustrada para poder lograr reflexiones propias y si sumamos que la vida en la corte ofrecía poco estímulo intelectual para el filósofo francés, se puede decir que Descartes se encontraba decepcionado y con ganas de marcharse cuanto antes.

El invierno le resultó intolerable y se quejó de la estación diciendo que "se hielan hasta los pensamientos de los hombres". El 1° de febrero de 1650, a sólo cuatro meses de su llegada a Suecia, Descartes enfermó de un resfrío que se convirtió en pulmonía, o así se dijo entonces; murió 10 días después. Siendo católico en la Suecia protestante, Descartes fue sepultado en un cementerio normal mente destinado a niños no bautizados. El embajador francés grabó en la lápida una enigmática inscripción: "Expió los ataques de sus rivales con la inocencia de su vida." ¿quiénes eran los rivales? Cierto era que otros cortesanos tenían razones para envidiar la prominencia del visitante francés, quien era el primero entre los académicos y artistas atraídos por Cristina a Estocolmo. ¿Acaso había un motivo religioso para querer quitar a Descartes del camino? Secretamente, la reina protestante se inclinaba al catolicismo y se supone que se carteó con el Papa y recibió a dos emisarios secretos de Roma. ¿Es que Descartes influyó sobre la reina en su misión espiritual? De ser así, debió haber varios en Estocolmo que temieran de su poder sobre la impresionable y joven soberana y que tenían razones de peso para querer eliminarlo.

Comienzan los rumores de Asesinato.

Al poco tiempo de morir, se comenzaron a tejer rumores sobre una posible conspiración de los intelectuales de la corte de Suecia para alejar a Descarte de la reina, incluso las sospechas se extienden a la miembros de la iglesia protestante, quienes vieron en las doctrinas católicas del francés un peligro hacia la estabilidad de la religión de Estado. Hay quienes dicen que la ortodoxia protestante era demasiado severa y rígida para la joven reina y su curiosidad intelectual. Tal vez se sintió atraída por la peculiar percepción religiosa de Descartes, aunque no hay evidencia de que él estuviera relacionado con su conversión.
En el circulo intimo de los allegados a Descartes en Suecia, se puede decir que no logró estrechar amistad con nadie, siempre fueron muy distantes con él, participaban de sus charlas y debates, incluso escribió algunas reflexiones por encargo. Esta situación llevo a que varias veces sintiera necesidad de marcharse de ese lugar tan hostil para su persona.

La peregrinación de sus restos y el robo del cráneo.

Después de su muerte el cuerpo de Descartes había de permanecer aún en Suecia dieciséis años, hasta que en 1666 los amigos y admiradores del sabio en Francia se decidieron a gestionar el regreso a la patria de los restos del grande hombre. El primero de mayo se procedió a su exhumación del lugar en que reposaban, donde habían sido enterrados, por permiso especial de la reina, según el ritual de la Iglesia romana. Los huesos, debidamente embalados y sellados, fueron enviados a Copenhague. Allí, como los marineros daneses se negasen a transportarlos -pues para ellos navegar con un cuerpo muerto era mal presagio-, fue preciso fingir que se trataba de una mercancía cualquiera. Durante los tres meses de retraso ocasionados por este incidente se encargó de su custodia el embajador francés en Suecia, el caballero de Terlon. Por fin, el difunto fue admitido a bordo del buque, y en aquella forma, poco solemne pero expeditiva, el féretro atravesó Alemania, Holanda y Flandes sin obstáculos.

Como nadie es profeta en su tierra, el segundo tropiezo lo tuvo Descartes al llegar a Francia. Allí los aduaneros del proteccionista Colbert vigilaban para que no se introdujese en el país ningún artículo que pudiese socavar la preponderancia industrial francesa. Tuvieron que abrir el envoltorio, y visto su contenido, pasaron adelante. El féretro fue depositado al fin en la iglesia de Santa Genoveva. Antes de ser puesto en su morada final, el ataúd fue abierto para realizar una revisión y se hizo un macabro descubrimiento: el cráneo había sido sustraído.

En el ataúd sólo se halló una tibia, un fémur, un cúbito y un radio; lo demás estaba pulverizado. Había también un hueso que se discutió durante largo tiempo si se trataba de un frontal. Pero es inverosímil que el cráneo hubiese quedado reducido a polvo antes que todo lo demás. El supuesto frontal, en todo caso, difícil de identificar, planteaba un enigma. En 1821, en carta fechada a 6 de abril, el químico sueco Berzelius manifestaba al paleontólogo Cuvier hallarse en posesión del auténtico cráneo de Descartes: no de un frontal ni unas mandíbulas, sino de una pieza casi entera a la que faltaba la mandíbula inferior.

Hay algunos indicios que hacen suponer que el cráneo fue robado en Suecia por el relato de unas Memorias de la reina Cristina de Suecia, fechadas en 1751, en que se dice siguiente: «No se debe pasar en silencio un hecho conocido por pocas personas... Un oficial de la guarnición de Estocolmo, comisionado para exhumar el féretro de Descartes cuando se trataba de transportarlo a Francia, habría hallado un modo de abrirlo, extrajo el cráneo del difunto, que conservó consigo durante el resto de sus días, muy cuidadosamente, como uno de los mejores recuerdos de aquel gran filósofo. Después de la muerte del oficial sus acreedores, en lugar de dinero, no hallaron nada más que aquel cráneo, que ha pasado después a otras manos. Aquel oficial se llamaba Isaac Planstrom.» Pero el cráneo también fue devuelto a Francia y registrado desde 1878 en el inventario de especimenes anatómicos del Musée de L'Homme en París. Desafortunadamente, cabeza y cuerpo permanecen separados hasta hoy en día junto al río Sena.

Informe médico, 330 años después.

En 1980, el publicista y científico alemán Eike Pies clasificaba correspondencia de Willem Piso, su ancestro del siglo XVII, en los archivos de la Universidad de Leyden en Holanda. De pronto, dio con el recuento de un testigo de la muerte de Descartes, 330 años antes: era una carta escrita por el médico de la reina Cristina, Johann van Wullen, un renombrado galeno de esa misma época. "Como usted sabe, varios meses atrás Descartes llegó a Suecia para rendir homenaje a Su Serena Majestad la Reina", escribió Van Wullen. "Justo ahora, a la cuarta hora antes del alba, este hombre expiró... La Reina quiso ver esta carta antes de enviarla. quiso saber qué escribí a mis amigos acerca de la muerte de Descartes. Me ordenó estrictamente evitar que mi carta cayera en manos de extraños." Movido por la curiosidad, Piso siguió leyendo la peculiar información de la misiva. A continuación se detallaba día por día el progreso de la enfermedad final de Descartes. ¿Por qué, se preguntó Eike Pies, juzgó necesario el médico de la corte sueca escribir a su colega de Holanda acerca del curso de una enfermedad tan común como la pulmonía? ¿Por qué la reina en persona censuró las noticias acerca de la muerte de su renombrado huésped? En busca de otra opinión, Pies tradujo la carta, omitió nombres, lugares y fechas, y la entregó a un patólogo criminalista. El veredicto: los síntomas descritos en la carta de Van Wullen corresponden a intoxicación aguda por arsénico. Dañando el tracto intestinal, esta intoxicación produce intensas náuseas y dolores estomacales. Las membranas mucosas se hinchan, estallan los vasos sanguíneos y la sangre mezclada con los jugos gástricos forma una masa negra que se excreta por los intestinos o por medio de vómito. Estos síntomas no son los que se asocian con pulmonía.

¿Cómo se resuelve un crimen de tres siglos de antigüedad? Hay pocas posibilidades de hallar al culpable y ninguna de hacer un juicio. Pero se puede reunir evidencia, pues el arsénico se deposita en los huesos, uñas y pelo de la víctima, y puede ser hallado mucho tiempo tras la muerte. ¿Deberían exhumarse otra vez los restos? Muchos protestarían seguramente por esta nueva perturbación en aras de la remota posibilidad de descubrir un crimen que ocurrió hace tanto. Y hallar al culpable, si es que hubo alguno, es imposible, además de innecesario hasta cierto punto. Pero Descartes fue el primer promotor de la investigación científica. Aplicando las cuatro reglas postuladas en el Discurso del método, se podría decir lo siguiente: 1) no es un hecho evidente que haya muerto de pulmonía, 2) el problema podría dividirse en cuatro partes: ¿fue envenenado?, ¿cómo?, ¿por quién?, ¿por qué motivo?, 3) el problema más sencillo es la causa de la muerte y esto podría resolverse antes de los problemas más difíciles, si no insolubles, 4) revisar las conclusiones, para asegurar que no se cometieron errores, añadiría una nota que seguramente resultaría fascinante a la historia y una conclusión más interesante a la biografía de uno de los pensadores más profundos e influyentes en las páginas del conocimiento indagado por el hombre.

¿Envenenamiento con arsénico?

En su época, se anunció que Descartes murió de pulmonía a principios de 1650. Esta enfermedad se inicia con resfrío, temblores, fiebre y agudos dolores de pecho; los subsecuentes síntomas incluyen tos, jadeos y expectoración color óxido. En contraste, la carta de la época del médico de la corte, Johann van Wullen, a un colega holandés, muestra un cuadro totalmente distinto al que presentaba el filósofo: "Durante los primeros dos días, su sueño fue profundo y no comió, bebió ni tomó medicamento. El tercero y cuarto días estaba agitado y no durmió, aún sin comer o medicarse. Al quinto día fui llamado a su lecho, pero Descartes no quiso que le diera tratamiento. Como las señales inequívocas de la muerte próxima eran obvias, acepté gustosamente mantenerme alejado del moribundo. Al pasar el quinto y sexto días, se quejó de mareo y de fiebre interna. Al octavo día, de hipo y vómito negro. Luego tuvo respiración inestable y la mirada extraviada, presagiando la muerte. Al noveno día, todo estaba perdido. A la mañana del décimo día su alma regresó a Dios." Esta descripción del avance de la enfermedad final de René Descartes coincide mucho mejor con los síntomas de intoxicación aguda por arsénico que con los que son característicos de la pulmonía. Si se confía en la carta del médico Johann van Wullen, Descartes pudo ser víctima de un asesinato.

Conclusión.

Nunca sabremos con certeza, si René Descartes murió envenenado por un posible complot intelectual-religioso en Suecia, o si efectivamente el frío intenso del invierno le provocó una pulmonía que terminó con su vida. Indudablemente todo apunta a sostener la teoría del asesinato como la mas firme, pero ¿quien fue el autor de semejante complot? esta pregunta quedará sin respuesta hasta que algún hallazgo casual eche luz sobre las causas de la muerte del Filósofo.

lunes, mayo 13, 2013

Cómo Reconocer que Estoy Despertando?

El despertar genera nuevas correspondencias a nivel externo e interno.
Hoy se habla mucho del despertar de conciencia y así como hay mucha información al respecto, igualmente hay desinformación.
En esta etapa de transición, el ego puede utilizar todo el conocimiento de sabiduría disponible a su acomodo, para seguirlo almacenando como creencia.

El camino hacia el despertar
Llevamos caminando hacia el despertar desde que empezó nuestra experiencia humana.
Al inicio del camino arrancamos como seres inocentes con la posibilidad de disfrutar de todo lo que fue puesto a nuestra disposición sin restricción alguna, en perfecta armonía e interconexión amorosa con todo lo que existe.
Fue tan potente la energía de perfección, paz y felicidad que experimentamos en ese momento, que quedó anclada en nuestro interior manifestándose como un impulso que nos llevaría a la búsqueda de la misma experiencia de nuevo.
Gracias a este impulso y a los frutos recogidos en el camino, nos graduaremos de la experiencia humana para continuar con un nuevo ciclo de servicio universal.
Como seres inocentes, sin ningún tipo de experiencia acumulada, comenzamos a recorrer el camino de una maravillosa experiencia, en donde se nos entregó un libre albedrío que nos permitiría experimentar la vida y probar todo el potencial de humanos y la correspondencia exacta con el medio afín, así como los resultados de todas nuestras acciones.
De la misma manera que un niño descubre que puede romper con sus manos, y se permite experimentar con lo que el padre le autoriza, nosotros empezamos a hacer uso de nuestro libre albedrío y a deshacer lo que fue puesto a nuestra disposición, con un uso inapropiado de nuestro potencial, de nuestro cuerpo físico y de todos los recursos que nos fueron dados.
Dentro del diseño perfecto y pedagógico del universo, y con el propósito de desarrollar la habilidad o sabiduría para volver a armar las piezas rotas, el camino de experimentación inocente nos fue llevando a descubrir los placeres del ego, creyendo que ese era el camino para llegar a experimentar aquel estado que parecía cada vez mas lejano.
El ego llegó a su punto máximo de ignorancia con una altísima dosis de creencias que nos llevaría a pensar que "lo sabemos todo", y que lo único que existe es lo que percibimos en este mundo limitado de la materia. Entonces olvidamos el propósito original del proceso y la orientación que nos daba un punto de referencia del origen, y de la ruta hacia donde nos dirigíamos.
Nuestros intereses egoicos nos impidieron recordar durante una parte del recorrido, el propósito original de experimentar la vida como seres humanos. Pero gracias a ello y a la saturación de los resultados indeseados, aprendimos que hay un orden perfecto y que aprender a identificarlo y a seguirlo, nos permite retornar al mismo punto de partida, esta vez no como seres inocentes, sino como humanos sabios.
Cuando ocurre el punto de saturación y experimentamos los resultados más dolorosos del uso del libre albedrío, la energía del ego se agota y este se rinde, permitiendo así que nos abramos a utilizar nuevas herramientas de Amor y a renunciar a las armas que le permitimos al ego utilizar... Es acá cuando empieza el camino consciente hacia el despertar...

¿Qué es el despertar?
Es importante conocer que el despertar no tiene nada que ver con creencias pues esto le pertenece al ego. El despertar está relacionado con la vivencia, la experiencia, el trabajo "personal e intransferible" de la comprensión del Amor y la trascendencia del ego.
Nada diferente a nuestra fuerza de voluntad, el compromiso, la disciplina y el desarrollo de nuestras virtudes internas puede hacernos despertar, pues es a través de la acción y de la transformación de las limitaciones instaladas, que se desarrolla la comprensión y se va des-activando nuestro sistema instintivo y de creencias.

¿Cómo reconocer que estoy despertando?
Entre tanta desinformación que hay, se está asociando el despertar con síntomas físicos y con nuevas energías que están entrando en el planeta, o con el simple hecho de adquirir el conocimiento.
Si bien estos son elementos que hacen parte del despertar, no son los indicadores más exactos para verificar qué está ocurriendo en cada uno.
El despertar es un proceso interno. Hay mucho apoyo que incluso no vemos o experimentamos con los cinco sentidos, para que trabajemos en él, mas sin embargo nadie puede hacerlo por nosotros.
Cuando empezamos a despertar, empezamos a vibrar en una frecuencia diferente, porque estamos dando un paso más hacia la vibración del Amor. Esto requiere vehículos que puedan sostener esta energía, así que también hay ciertos cambios que deben ocurrir a nivel de nuestro cuerpo físico, pero como consecuencia del trabajo interno que estamos realizando. No al revés.
- El verdadero y más exacto termómetro del despertar son las correspondencias que empezamos a experimentar a nivel interno, como la incondicionalidad en dar lo mejor de sí y mayor sensación de paz y felicidad, independientemente de los sucesos que puedan estar sucediendo alrededor. Como resultado de esto, mejoría en las relaciones, la salud, la adaptabilidad y la relación con los recursos.
- Comienza el proceso de despertar cuando dejamos de evolucionar en automático, empezamos a reconocer a nuestro ego y a trabajar voluntaria y conscientemente para gobernarlo...
Dejo de depender de lo externo y manejo mi vida totalmente desde mi interior, asumiendo total responsabilidad de mis propios resultados.
- Dejo de creer que alguien me hace daño, que alguien me perjudica o me beneficia, y de igual forma soy consciente de que no perjudico ni beneficio a nadie.
- No culpo a nada, nadie ni a mí mismo porque sé que el culpable no existe. Por lo tanto me libero de la necesidad de defenderme o defender a algo o a alguien por "bueno" que parezca para el ego.
- Dejo de pedir a otros que me solucionen mis dificultades, porque comprendo que soy el único que puede transformar aquello que las genera. Me dispongo a tomar la acción que permite desarrollar mi sabiduría.
- Asumo que mis errores son una forma de evaluación y de lo que me falta por aprender de mí mismo. Permito que cada quien asuma los suyos.
- Comprendo que estar inmerso en situaciones desagradables para mi ego, implica una oportunidad de desarrollo de consciencia, por lo tanto no huyo de mi compromiso de integración con todo lo que me rodea.
- Comprendo que solo las interpretaciones de mi ego pueden generar sufrimiento y situaciones "inmanejables".
- Transformo mis miedos en energía de conciencia.

A partir de este momento:
* No hay rencor, resentimiento, odio, posesividad ni sufrimiento en mi interior.
* Desaparece la idea de injusticia de mi mente, porque comprendo que este concepto se origina sólo en creencias.
* Comprendo que el lugar en donde me encuentro es perfecto con respecto a mi propio desarrollo, y renuncio a resistirlo, evadirlo o huir de el.
* Decido voluntariamente comprometerme para trabajar sobre mí mismo y no sobre los demás.
* Decido perfeccionar mi espíritu y nivelarme con los demás.
* Me desapego de todo y de todos porque mi felicidad, paz y estado de Amor no depende de nada ni de nadie.
* Sirvo dando lo mejor de mí sin condición alguna.
* Aumenta mi energía vital.
* Comienzo a disfrutar de todo lo que hago.
* Aumenta mi prosperidad como resultado de reconocer, potenciar y poner a disposición de los demás lo mejor de mí.
* Mejoran las relaciones y se establecen nuevas cada vez mas armónicas y afines.
* Me siento bien en donde me encuentre porque me conecto desde lo que soy y no desde las máscaras del ego que quedaron atrás.
* Mi cuerpo físico comienza a regenerarse y a recuperar los patrones originales con los que fue creado.
Fuente: http://www.totalpresenceespanol.org/como-reconocer-que-estoy-despertando.php

viernes, abril 26, 2013

Las 4 Leyes de la Espiritualidad Hindú



La primera dice:
"La persona que llega es la persona correcta"
Es decir que nadie llega a nuestras vidas por casualidad, todas las personas que nos rodean, que interactúan con nosotros, están allí por algo, para hacernos aprender y avanzar en cada situación.

La segunda ley dice:
"Lo que sucede es la única cosa que podía haber sucedido".
Nada, pero nada, absolutamente nada de lo que nos sucede en nuestras vidas podría haber sido de otra manera. Ni siquiera el detalle más insignificante. No existe el: "si hubiera hecho tal cosa...hubiera sucedido tal otra...". No. Lo que pasó fue lo único que pudo haber pasado, y tuvo que haber sido así para que aprendamos esa lección y sigamos adelante. Todas y cada una de las situaciones que nos suceden en nuestras vidas son perfectas, aunque nuestra mente y nuestro ego se resistan y no quieran aceptarlo.

La tercera dice:
"En cualquier momento que comience es el momento correcto".
Todo comienza en el momento indicado, ni antes, ni después. Cuando estamos preparados para que algo nuevo empiece en nuestras vidas, es allí cuando comenzará.

La cuarta y última:
"Cuando algo termina, termina"
Simplemente así. Si algo terminó en nuestras vidas, es para nuestra evolución, por lo tanto es mejor dejarlo, seguir adelante y avanzar ya enriquecidos con esa experiencia. Creo que no es casual que estén leyendo esto; si este texto llega a nuestras vidas hoy es porque estamos preparados para entender que ningún copo de nieve cae alguna vez en el lugar equivocado!

21 Mensajes para Transmitir a cada Miembro de la Siguiente Generación.

Alejandro Jodorowsky

1.-Eres un ser deseado. Estás aquí porque el Universo lo quiso.
2.-Siente que eres libre de ser lo que eres, no permitas que nada ni nadie te etiquete, ni te imponga guiones que no se corresponden con tu autenticidad.
3.-Cada ancestro de tu árbol es un don que hay dentro de ti para ser usado a tu favor y al de todo el Universo.
4.-Aprende a no pedir amor, simplemente ama.
5.-Cree en los pequeños milagros de cada día y atiende a las coincidencias, en ellas hay mensajes ocultos que te guían en el correcto camino.
6.-Cada día, haz un acto generoso con alguien cercano.
7.-Si en tu árbol genealógico hubo traumas, sánalos actuando.
8.-Déjate guiar por tu cuerpo, es sabio. Él te alertará de las situaciones de las que debas alejarte, sintiendo tensión y malestar. También te dirá cuando estás alineado con lo que eres, sintiendo relajación y bienestar.
9.-No contamines tu cuerpo con tóxicos o una mala alimentación.
10.-En cuanto puedas, sé independiente. Trabaja utilizando tu creatividad y hazte adulto.
11.-Escribe un poema cada día.
12.-Busca y provoca situaciones que te hagan reír.
13.-Tiende a compartir, a colaborar a ser solidario.
14.-Cuando tengas problemas, puedes analizarlos, puedes hablarlos, pero ten por seguro que hasta que no actúes no se producirá la transformación.
15.- Siente GRATITUD por todo lo que te regala el Universo.
16.- Recuerda que nada en este plano de existencia perece, sino que se transforma.
17.-Lee, estudia, conoce… experimenta por ti mismo.
18.-No te apegues a nada material. No consumas lo que no necesitas.
19.-Tampoco te apegues a ninguna creencia. Lo mismo que tu cuerpo se renueva constantemente, también lo deben hacer las ideas.
20.-Siembra cada día las semillas que te lleguen de dentro o de fuera. La semillas pueden ser palabras, caricias, belleza, acciones. Ellas son los gérmenes de más sabiduría, amor, arte y salud.
21.-Cuida con mimo el territorio que está más allá de tu cuerpo, tu casa, tu barrio, tu ciudad… el planeta y el Universo.

lunes, abril 09, 2012

La Huella del Pajarillo en el Cerro URITORCO



La Huella del pajarillo, hecho sucedido en la Sierra del Pajarillo, sucedido en las cercanías de Capilla del Monte, Córdoba, Argentina. Por sus características es única en el planeta, y propone actualmente reflexiones profundas del porqué esa nave observada por testigos de Excepción: un niño de 12 años GABRIEL GOMEZ, y su abuela hoy fallecida la señora ESPERANZA GOMEZ.

En su momento los investigadores de campo dejaron establecido que algo tuvo que dejar el que una nave de estas proporciones pasara cerca de Capilla del Monte y nos dejara esta Huella.

Jorge Suárez, en su momento era Director de Turismo y Secretario de Gobierno. Ante el anuncio de un vecino se propuso ir, y frente a esto que era raro, asombroso y sin explicaciones, pensó en llevarlo a la prensa donde el tenía ingreso por su tarea en Turismo. Radio Universidad es la radio y da espacio a la noticia, en ese momento el señor CLAUDIO SALINAS, propone la nota.

Telan, Agencia de Noticias del Mundo, toma la noticia que estaba propuesta desde un estamento gubernamental.

Así comienza una propuesta en Capilla del Monte, que aún quienes visitan y viven en este bello lugar aún no han contemplado las bondades de el paso de esta nave. Recorra con nosotros este apasionante hecho y saque usted sus propias conclusiones.

Paso a paso vamos recorriendo lo sudedido y lo investigado. Dos fases importantes nos enmarca El hecho que trajo como consecuencia:

1. Una afluencia de turistas poco vistas en tan poco tiempo: en el año 1986 al Cerro Uritorco lo visitaban 400 personas por año. Hoy lo visitan 100.000.

2. En el año 2001, año de un grave problema económico de Argentina, en Capilla del Monte se duplica la población residente. Contaba con cerca de 5000 habitantes. Hoy Capilla del Monte la habitan 12.000 habitantes y en època de Temporada alta suma en alto porcentaje de visitantes que vienen interesados en la temática.

3. El turismo en Capilla del Monte lo convocaba la naturaleza, la tranquilidad, el Zapatao un monumento de Piedra y algo más. Desde el año 1986, por simplemente haber propuesto esta nota en Radio Universidad, los medios de Prensa y los muy buenos Investigadores de todo el mundo miraron hacia este caso tambien hubo de los otros.

4. Gracias a las investigaciones de Campo que se hicieron en su momento, URITORCO, pasó a tener primer plano, ya que desde la época ya se mensionaba este Cerro.

PRIMERA FASE

La noche del 9 de Enero de 1986,en una finca rural ubicada a metros de la ruta provincial 17 que corre paralela a la sierra del pajarillo y que une la ruta nacional 38 con el paraje conocido como las grutas de Ongamira, se encontraban tres integrantes de la familia Gómez Doña Esperanza, su hermana Sara que residía en Buenos Aires y su nieto Gabriel de 12 años de edad que vivía en la vecina localidad de Cruz del Eje y que como todos los veranos pasaba sus vacaciones en casa de su abuela.

Siendo, pasada las 22 horas se encontraban a la luz de un farol de kerosene, ya que por aquellos años la casa no tenía energía eléctrica, jugando una partida de naipes. La noche era muy calurosa como corresponde a la época estival de la región al norte del Valle de Punilla, por ello las puertas y ventanas de la modesta vivienda se encontraban abiertas; de pronto doña Esperanza cree escuchar el ruido de un auto que parecía llegar a la finca. Al fijar su atención en este sonido interrumpió el juego que también habían percibido Sara y Gabriel. A continuación vieron que una potente luz roja penetrando por ventanas y puertas, iluminó toda la habitación; ante el estupor de los tres, se incorporaron de sus sillas y se dirigieron hacia la ventana que da al frente de la casa y vieron una luz roja muy grande que corría de un lado al otro por las lomadas del Pajarillo y momentos después la vieron sobrevolar la chacra y luego se poso sobre el sauce que se encontraba a unos diez metros de la casa. Doña Esperanza sintió mucho miedo ya que pensó que esa luz podía dejarlos ciegos porque la luz era verdaderamente enceguecedora, y junto a Sara se retiró a las habitaciones interiores mientras llamaban enérgica mente a Gabriel que se había quedado inmovilizado en la ventana observando ese extraño objeto que tanto pánico le había provocado a su abuela y a su tía.

Doña Esperanza le dijo a Gabriel si quería cerrara la ventana. Cuando fue a cerrarla, a través de la reja vio la luz. De pronto esta prendió la luz roja y no la pudo ver bien, pero cuando se prendía la clarita, lo podía ver mejor. Lo primero que pensó era la luz mala, porque venía de la sierra y no podía ver bien que era. Se veía cada vez más grande y se movía balanceándose y cuando apagó la luz roja la pudo ver bien.
“Era una cosa redonda con esas ventanillas. A la altura de estas, alumbraba la luz roja y la de arriba era clarita, me dio mucho miedo y luego de cerrar la ventana me acosté pero la espíe por la ventana de mi habitación mientras pensaba que el ruido que escuchamos al principio pudo ser un auto pero nada tenia que ver con la luz que vi. porque esta no hacia ruido, si realizaba constantes cambios de luces entre la clarita y la roja; inclusive cuando esta se apagaba, se apreciaba una pelota achatada que mostraba desde los bordes externos unas líneas de luz blanca, como tubos fluorescentes que se dirigían a su centro. Mi abuela no cree en estas cosas pero lo que vi no era un avión y no hacia ruido.”-esto era lo que decía Gabriel.
A la mañana siguiente llegó a la casa el hijo de Doña Esperanza, Manuel Gómez, que regresaba de su trabajo nocturno y al pasar por la ruta frente al Pajarillo observo una extraña mancha ovoide de color negro sobre la ladera sur-este del Pajarillo. Al comentar luego con su familia esta circunstancia, estos le relataron la noche de miedo que habían pasado. Gabriel se interesó por la ubicación de la extraña huella y así pudo certificar que estaba en el mismo punto desde donde el creyó ver venir el objeto en dirección a la casa de su abuela.

Fue tanta la sorpresa de Manuel por el relato de su familia y la aparición de esa fracción de pastos quemados en la sierra, que decidió ensillar dos caballos y acompañado de Gabriel se dirigieron al lugar.
El primer intento del primer día fue fallido ya que equivocaron la senda por eso un tanto desilusionados regresaron, pero con la fiel promesa de volverlo a intentar al día siguiente. Así fue como por fin bien orientado llegaron al lugar. A Gabriel le pareció raro lo que veía. Estaba todo quemado en una gran superficie pero de una forma curiosa ya que la paja brava estaba quemada en la parte superior, de abajo nada; algo muy diferente a los acostumbrados incendios forestales que son tan frecuentes en la zona.

Días después, como Secretario de Gobierno de la Municipalidad de Capilla del Monte, recuerdo:”Una mañana llegó a mi despacho un vecino relatándome que en la zona del Pajarillo había aparecido una extraña mancha quemada justo frente a la finca de los Gómez. Esto no se porque me llamó la atención y comenté el incidente con el señor Intendente, ,Don Diego Sez quien casualmente era amigo personal de la familia Gómez. Y de pura curiosidad organizamos una excursión a la zona. La comitiva se completó con la presencia del entonces Diputado provincial Andrés Argañaraz, el fotógrafo Municipal Don Raúl Ochonga, el señor Intendente, el menor de sus hijos y yo.
Cuando llegamos a la zona estaba lloviendo y las nubes tenían un plafón muy bajo. Llegamos a la finca donde nos recibió Doña Esperanza amablemente, a quien interrogamos sobre lo sucedido días atrás.

Doña Esperanza nos relató todo el miedo que habían vivido aquella noche, pero nos sugirió que habláramos con Gabriel ya que el era quien más sabía del suceso. Para ello teníamos que desplazarnos unos kilómetros hacia Ongamira, donde el niño se encontraba jugando con unos amiguitos y hacia allí nos dirigimos.
Hallamos a Gabriel jugando con sus amiguitos. Este era un niño común, con esa imagen de ingenuidad que tienen los niños de su edad en esta parte de Córdoba. Nos narró con total simpleza los hechos ocurridos en la noche del 9 de enero; inclusive dibujo en el suelo arenoso del lugar en donde nos encontramos, la forma del objeto que el vio aquella noche.

Nos narró también la excursión que realizó con su tío Manuel para comprobar aquella misteriosa quemazón sobre la ladera del Pajarillo y ante nuestra consulta se ofreció a llevarnos hasta el lugar donde según él, se podía ver con total propiedad esa extraña mancha. Subimos a los autos y nos dirigimos al lugar.
Cuando llegamos al lugar nos dimos cuenta que ya habíamos pasado por el sitio desde donde se observaba la misteriosa marca que no vimos por las nubes bajas que presentaba una pequeña tormenta de verano. Al descender del auto, la visión de esa especie de pelota negra que quizás alguien había olvidado sobre esa vegetación verde esmeralda, brillaba de una manera especial como consecuencia de la lluvia caída momentos antes.

El espectáculo era fascinante. Raúl, el fotógrafo municipal preparó sus cámaras y comenzó a registrar imágenes que al correr de los años se fueron convirtiendo en un documento formidable que luego recorrió todo el mundo. Mientras los demás nos interrogábamos con la vista ¿que era aquello?, estuvimos realizando distintas consideraciones quizás todas ellas tan absurdas, como equivocadas. Luego nos dispusimos a desandar el camino hacia Capilla del Monte.

Al llegar se me ocurrió informar a La radio de la Universidad de Córdoba este extraño hecho. El conductor del programa que se emitía en esos momentos me permitió salir al aire para contar lo sucedido en el Pajarillo. Este informe lo copió la agencia de noticias TELAM, que lo transmitió al País y a todo el mundo. Luego. a los pocos días una legión de periodistas, investigadores y curiosos, por que no?,comenzó a llegar al lugar.

Sin saber absolutamente nada ,un investigador del equipo de Fabio Zerpa, causalmente había elegido a Capilla del Monte para pasar sus vacaciones, el señro Hector Antonio Picco,(ahora vive en Capilla del Monte). Durante el viaje hubo de hacer una parada en Villa Carlos Paz y en una kiosco de venta de diarios se enteró desde los titulares de los matutinos que algo misterioso había sucedido en una Sierra llamada del Pajarillo. Enseguida su fino olfato de investigador le indicó que podía estar ante un fenómeno unido a la temática OVNI. Y para colmo el suceso había ocurrido cerca de el lugar donde pasaría unos días de descanso.
Al llegar a Capilla del Monte, se alojó en el camping Municipal y una vez instalado se dirigió a entrevistar a Jorge Suárez, funcionario de Gobierno municipal que había informado a la prensa sobre los detalles del acontecimiento. Luego de la reunión donde se interesó de los pormenores del caso, solicitó del funcionario ayuda para trasladarse al lugar, entrevistar a los testigos y si era lo que suponía comenzar con la investigación de campo.

Luego en la finca de los Gómez, y realizar la entrevista con los testigos, su experiencia en la investigación le hizo reparar en un detalle que los funcionarios habían dejado pasar. El sauce en donde Gabriel avistó detenido el objeto, 24 horas después comenzó a deshojarse como si algo misterios hubiera acelerado su tiempo biológico. El investigador recogió algunas de aquellas hojas, las puso en una bolsa de plástico, para luego ser analizadas en laboratorio. Pero mucho antes de estas conclusiones científicas, aquel añejo sauce protagonizó otro hecho sorprendente.
A los pocos días, comenzó a florecer nuevamente para recuperar todo su hojas y seguir su vida normal como si nada hubiera pasado. ¡ ¡Si!,...algo había pasado, meses después me envió un informe realizado en un importante laboratorio de Buenos Aires donde se pudo comprobar que aquella "cosa" que Gabriel vio detenida sobre la copa del sauce, por un método desconocido "chupo" toda la clorofila de aquel árbol. Esta realidad se comprobó tratando de hidratar las hojas, cosa que resulto imposible. Vale la pena puntualizar que esta circunstancias habían podido certificarse en otros descenso de OVNIs en distintas partes del mundo. Conclusiones atípicas, también ofrecieron los estudios realizados con los insectos, la tierra, las cenizas, la poca vegetación que quedó sin mientras la sociedad capillense después de este fenómeno se psicotisó de una manera tan sorprendente como natural. Los periodistas e investigadores siguieron llegando tratando de descubrir la verdadera entidad del fenómeno.

Quien llevó una inteligente y silenciosa investigación de campo fue el licenciado Ángel Díaz, reiteradamente y en solitario volvió al Pajarillo para rastrear todos los elementos que se pudieran recoger sobre el terreno. Esta paciente investigación fue dejando la conclusión que estábamos ante un hecho muy misterioso pero que encajaba con el fenómeno OVNI, máxime si se lo unía a los relatos de la familia Gómez.

Es honesto reconocer que otros investigadores elaboraron la hipótesis de que la huella la produjo un incendio natural que se inicio en la parte baja de la ladera del Pajarillo y que luego, tras un brusco cambio de viento se apago formando espontáneamente ese gran semicírculo de vegetación quemada. En lo personal me pareció una explicación absurda ya que tendríamos que ignorar la presencia del OVNI la noche anterior sobre la finca de los Gómez. Y un dato interesante es mencionar que esta conclusión se elaboro durante un día de trabajo. No obstante y en homenaje a la intención de descubrir la verdad auténtica, interrogamos sobre esta posibilidad a vaquéanos del lugar que habían visto quemar la sierra por incendio naturales en forma frecuente y estos nos miraban con una sonrisa irónica y contestaban:” mire don , yo no sé lo que produjo esa mancha pero un fuego que cambia de dirección por el cambio del viento, no me lo creo porque cuando el fuego arranca quema y quema. Puede apagarse por la llegada de un fuerte cambio de viento, pero por lo menos hasta ahora nunca dejó un dibujo tan perfecto.”

Una opinión muy calificada se recibió de un integrante del cuerpo de bomberos de Capilla del Monte: Raúl (Pancho) Lobos que como muchos otros llegó al lugar atraído por la curiosidad y con su amplia experiencia de hombre que había luchado contra el fuego con frecuencia en la sierra, expresó una serie de consideraciones que fueron muy útiles para la interpretación del fenómenos del Pajarillo. En principio consideraba improbable que la huella fuera producido por un incendio natural, sí pensaba que se podía haber provocado, pero hubiera exigido una serie de elementos como logística y un buen número de personas para lograrlo sin dejar de desconocer que los continuos vientos que se registran en la zona alta de la sierra, hacían la tarea casi imposible. Otro tema que le llamó la atención fue el cambio de coloración de las piedras que se ennegrecieron en la parte superior de una forma muy misteriosa. Hubiera sido muy dificultoso haberlo hecho con un soplete o con lo que fuera, una por una. Otro dato interesante que encontró, fue que la paja brava quemada que tapizaba el lugar, mostraba que la quemazón estaba por encima del terreno y que fue afectada por la onda de calor. La poca que quedó en el lugar, demostraba que se había quemado de arriba hacia abajo, diferente hubiera sido si el fuego se hubiera arrastrado por el terreno.

Los insectos encontrados dentro de la huella ofrecían unas particularidades sorprendentes, ya que los mismos estaban como momificados, en su parte exterior intacta pero estaban vacíos por dentro, como si algo misterioso hubiera vaciado todos sus líquidos vitales. Algo que sorprendió fue el hallazgo de un pequeño batracio que ofrecía las mismas características de los insectos pero además, su piel no había cambiado de coloración, situación que si hubiera ocurrido, si hubiera sido afectado por fuego, estábamos ante algo tan misterioso como sorprendente.
Si suponíamos que aquí había terminado la historia, la realidad nos demostraría que no era así.

Un año y medio después ocurrió otro hecho sobre el Pajarillo que agregaría a esta historia una dosis mayor de incomprensible misterio, y que HOY SE CONOCE A ESE HECHO COMO LA SEGUNDA FASE DEL PAJARILLO.

SEGUNDA FASE HUELLA DEL PAJARILLO

Decíamos al terminar de narrar la Primera Fase de la Huella del Pajarillo, que suponíamos por aquellos días que la historia había terminado, pero que la realidad nos demostraría lo contrario produciendo un hecho mucho mas sorprendente e inexplicable que la aparición de la huella el 9 de enero de 1986.

El hecho que vamos a narrar se produjo un año y medio después más precisamente en agosto de 1987. Por esos días yo estaba totalmente volcado al estudio de la temática ovni, por cuanto me había impresionado las historias que me contaron los investigadores que conocí en oportunidad cuando visitaran Capilla del Monte para realizar la investigación de campo sobre la primera fase de la huella.

Una tarde mientras tomaba café con unos amigos en un bar del pueblo, se acerca a nuestra mesa un conocido y me pregunta, ¿Suárez, hace mucho que no va por el Pajarillo? Y le dije que efectivamente hacia mucho tiempo que no iba por la zona. Entonces me sugirió, porque no va?¡¡¡. Me quedé interrogándolo con la mirada: vaya!!, se va a llevar una sorpresa, insistió y se fue. Me quedé pensando y preguntándome:
¿Que podía haber pasado?.

En un momento recordé que un voraz incendio de los tantos que se producen en la zona muchas veces provocados y otras en forma natural, se había llevado por delante muchas hectáreas de pastizales que tapizan las laderas del Pajarillo. Pero que podía significar esto?..Y decidí averiguarlo al día siguiente.

Luego de almorzar monté en mi camioneta para recorrer los pocos kilómetros que separan Capilla del Monte con el lugar donde encontramos la huella el año anterior. Luego de transitar por el tramo de asfalto de la ruta ingresé al camino de ripio que luego de pasar por Quebrada de Luna se llega a las enigmáticas Cuevas de Ongamira, no sin antes admirar una vez más las imponentes formaciones de los Terrones que se aprecian a la distancia desde el camino.

Durante el viaje pude apreciar la importancia del incendio ocurrido horas antes. Hacia la izquierda del camino se advertía sobre el faldeo de la sierra, solo tierra quemada con algún matiz de gris a los pies de algún árbol, producto de la ceniza de su propio tronco quemado.

Al llegar al lugar, al sitio desde donde habíamos avistado la huella el año anterior que se identificaba por la existencia de una alcantarilla. Detuve el vehículo y me bajé. Al levantar la vista hacia la Sierra me quedé congelado. Allí, en el mismo y exacto lugar donde habíamos descubierto aquella fenomenal "pelota negra" depositada sobre el verde esmeralda de la paja brava; ahora la encontraba, sobre un terreno de color negro profundo, producto del incendio, la misma "pelota”, pero en este caso de un color amarillo que contrastaba con lo negro del incendio. Fue tan grande la impresión que me causó, y no tengo vergüenza en confesarlo, lágrimas de emoción comenzaron a deslizarse por mi rostro.

Yo por esas fechas me había interesado muy especialmente en el tema OVNI como ya comenté, pero también había "otras experiencias" que me habían marcado muy profundamente, por lo que quizás, sirva para explicar mi estado emocional de aquellos momentos. O, por qué comenzaba a comprender que aquella huella, hoy conocida en todo el mundo como "La Huella del Pajarillo”, sugería algo mucho mas serio que el simple hecho de una marca, producto de la presencia de aquella nave que avistó Gabriel desde la casa de su abuela.

Quizá era la confirmación de la importancia de aquella Huella, ya que de ella se dijo que había sido quemada con fines turísticos, y entonces ahora la presencia de algo misterioso y desconocido nos desafiaba con esta segunda fase a que explicarnos lo inexplicable.

En lo personal siempre he dicho que si aceptamos la estupidez de que la huella se quemó con soplete de acetileno (¿) en ese rumbo podríamos aceptar la historia de que advertidos del incendio subimos corriendo con baldes de arena o agua para mojar la vegetación y así protegerla del fuego. Les recuerdo que el volumen de aquella huella era de 120x70 mts. aprox..., y quizás también aceptar en ese rumbo que alguien subió aquella noche al sauce de los Gómez y con una jeringa "chupó” hoja por hoja su clorofila para explicar el deshoje de aquel añejo árbol.

Días después que concurrimos al mismo lugar donde estaba la huella con Fernando Gabriel Sansó periodista de radio universidad de Córdoba y realizamos una prueba sobre el terreno. Encendimos fuego a la paja brava y la misma se quemaba con facilidad.... Y nos preguntábamos con Fernando ¿qué pasó durante el incendio? ¿Cómo se explicaba que no se hubiera quemado ese rubio pastizal que tenía la misma combustibilidad que su similar del exterior y se había consumido totalmente quedando sobre el terreno, solamente las piedras....

Esa pregunta, quizás encontró respuesta cuando el Ingeniero del equipo de televisión de la TV de España que con Juan José Benítez y el Dr. Fernando Jiménez del Oso en la parte periodística realizaban unas tomas en la huella, encontró a través de los equipos inalámbricos de grabación se comprobó una interferencia que entorpecía la tarea de Don Pepe Nogueira. En la opinión de los periodistas, como hipótesis para explicar esas interferencias, aquella nave ancló sobre el terreno una energía desconocida que como efecto de campana, protegió la huella del fuego.

Esta realidad la confirmó en enero del 89 el Ingeniero Guido Bassler durante un trabajo de campo de bioenergía que publicamos en detalle en nuestro libro "Uritorco, el Cerro mas misterioso de América".

Honestamente creo que ésta voluntad de las culturas extraterrestres que visitan nuestro planeta de dejar testimonios de su presencia de distintas maneras obedece a sugerirnos amorosamente:Que no estamos solos en el universo.

COSECUENCIAS DE UN HECHO OVNI

Es muy característico qeu un hecho catallogado como del FENOMENO OVNI, quedeen el catalogo y como unexpediente más.
Son pocos los que al pasar el tiempo nos muestre o podamos leer en el tiempo nuevamente el hecho con otras lecturas a las inicales.
Es el caso LA HUELLA DEL PAJARILLO, un hecho que aún nos propone una cantidad de preguntas continuamente y lo expresan los turistas que visitan el CIO año tras año:
Las vamos a proponer y de la misma manera que las respondemos en Nuestro CENTRO DE INFORMES OVNI de Capilla del Monte, nos ocuparemos de responderlas lo mas ilustrativamente posible.

*¿ LA HUELLA AUN SE ENCUENTRA EN EL LUGAR.?
*¿PORQUE LA HUELLA SE HIZO EN LA SIERRA DEL PAJARILLO Y NO EN EL URITORCO?
*¿PORQUE ES EL CERRO URITORCO , QUE SE NOMBRA Y NO LA SIERRA DEL PAJARILLO?
*¿QUE SUCEDIO EN CAPILLA DEL MONTE DESPUES DE LA HUELLA DEL PAJARILLO?
*QUE HACEN LAS AUTORIDADES DE CAPILLA DEL MONTE ANTE ESTE HECHO?
*USTEDES PORQUE SE OCUPAN DE HACER ESTA TAREA?

Cada pregunta contiene su respuesta.
Han pasado 26 años, y de la HUELLA DEL PAJARILLO, en Capilla del Monte a penas si es mencionada.
Como es nuestra intención hacer Docencia, paso a paso propondremos un antes y un despues DE LA HUELLA DEL PAJARILLO para describir la realidad actual de las consecuencias que este hecho trajo consigo y aun permanece vigente.
Jorge Suarez al haber estado cerca de la tarea que realizaron Investigadores de buen nivel, y de lrealizar la logistica para la prensa que aún hoy se motiva por el hecho,;es quien tiene AUTORIDAD para contar lo vivido por esos días, despues de haber comaprtido la sociedad desde aquel suceso.
ecíamos al terminar de narrar la Primera Fase de la Huella del Pajarillo, que suponíamos por aquellos días que la historia había terminado, pero que la realidad nos demostraría lo contrario produciendo un hecho mucho mas sorprendente e inexplicable que la aparición de la huella el 9 de enero de 1986.

El hecho que vamos a narrar se produjo un año y medio después más precisamente en agosto de 1987. Por esos días yo estaba totalmente volcado al estudio de la temática ovni, por cuanto me había impresionado las historias que me contaron los investigadores que conocí en oportunidad cuando visitaran Capilla del Monte para realizar la investigación de campo sobre la primera fase de la huella.

Una tarde mientras tomaba café con unos amigos en un bar del pueblo, se acerca a nuestra mesa un conocido y me pregunta, ¿Suárez, hace mucho que no va por el Pajarillo? Y le dije que efectivamente hacia mucho tiempo que no iba por la zona. Entonces me sugirió, porque no va?¡¡¡. Me quedé interrogándolo con la mirada: vaya!!, se va a llevar una sorpresa, insistió y se fue. Me quedé pensando y preguntándome:
¿Que podía haber pasado?.

En un momento recordé que un voraz incendio de los tantos que se producen en la zona muchas veces provocados y otras en forma natural, se había llevado por delante muchas hectáreas de pastizales que tapizan las laderas del Pajarillo. Pero que podía significar esto?..Y decidí averiguarlo al día siguiente.
Luego de almorzar monté en mi camioneta para recorrer los pocos kilómetros que separan Capilla del Monte con el lugar donde encontramos la huella el año anterior. Luego de transitar por el tramo de asfalto de la ruta ingresé al camino de ripio que luego de pasar por Quebrada de Luna se llega a las enigmáticas Cuevas de Ongamira, no sin antes admirar una vez más las imponentes formaciones de los Terrones que se aprecian a la distancia desde el camino.

Durante el viaje pude apreciar la importancia del incendio ocurrido horas antes. Hacia la izquierda del camino se advertía sobre el faldeo de la sierra, solo tierra quemada con algún matiz de gris a los pies de algún árbol, producto de la ceniza de su propio tronco quemado.

Al llegar al lugar, al sitio desde donde habíamos avistado la huella el año anterior que se identificaba por la existencia de una alcantarilla. Detuve el vehículo y me bajé. Al levantar la vista hacia la Sierra me quedé congelado. Allí, en el mismo y exacto lugar donde habíamos descubierto aquella fenomenal "pelota negra" depositada sobre el verde esmeralda de la paja brava; ahora la encontraba, sobre un terreno de color negro profundo, producto del incendio, la misma "pelota”, pero en este caso de un color amarillo que contrastaba con lo negro del incendio. Fue tan grande la impresión que me causó, y no tengo vergüenza en confesarlo, lágrimas de emoción comenzaron a deslizarse por mi rostro.

Yo por esas fechas me había interesado muy especialmente en el tema OVNI como ya comenté, pero también había "otras experiencias" que me habían marcado muy profundamente, por lo que quizás, sirva para explicar mi estado emocional de aquellos momentos. O, por qué comenzaba a comprender que aquella huella, hoy conocida en todo el mundo como "La Huella del Pajarillo”, sugería algo mucho mas serio que el simple hecho de una marca, producto de la presencia de aquella nave que avistó Gabriel desde la casa de su abuela.

Quizá era la confirmación de la importancia de aquella Huella, ya que de ella se dijo que había sido quemada con fines turísticos, y entonces ahora la presencia de algo misterioso y desconocido nos desafiaba con esta segunda fase a que explicarnos lo inexplicable.

En lo personal siempre he dicho que si aceptamos la estupidez de que la huella se quemó con soplete de acetileno (¿) en ese rumbo podríamos aceptar la historia de que advertidos del incendio subimos corriendo con baldes de arena o agua para mojar la vegetación y así protegerla del fuego. Les recuerdo que el volumen de aquella huella era de 120x70 mts. aprox..., y quizás también aceptar en ese rumbo que alguien subió aquella noche al sauce de los Gómez y con una jeringa "chupó” hoja por hoja su clorofila para explicar el deshoje de aquel añejo árbol.

Días después que concurrimos al mismo lugar donde estaba la huella con Fernando Gabriel Sansó periodista de radio universidad de Córdoba y realizamos una prueba sobre el terreno. Encendimos fuego a la paja brava y la misma se quemaba con facilidad.... Y nos preguntábamos con Fernando ¿qué pasó durante el incendio? ¿Cómo se explicaba que no se hubiera quemado ese rubio pastizal que tenía la misma combustibilidad que su similar del exterior y se había consumido totalmente quedando sobre el terreno, solamente las piedras....
Esa pregunta, quizás encontró respuesta cuando el Ingeniero del equipo de televisión de la TV de España que con Juan José Benítez y el Dr. Fernando Jiménez del Oso en la parte periodística realizaban unas tomas en la huella, encontró a través de los equipos inalámbricos de grabación se comprobó una interferencia que entorpecía la tarea de Don Pepe Nogueira. En la opinión de los periodistas, como hipótesis para explicar esas interferencias, aquella nave ancló sobre el terreno una energía desconocida que como efecto de campana, protegió la huella del fuego.

Esta realidad la confirmó en enero del 89 el Ingeniero Guido Bassler durante un trabajo de campo de bioenergía que publicamos en detalle en nuestro libro "Uritorco, el Cerro mas misterioso de América".

Honestamente creo que ésta voluntad de las culturas extraterrestres que visitan nuestro planeta de dejar testimonios de su presencia de distintas maneras obedece a sugerirnos amorosamente.

EL CABLE DE LA AGENCIA TELAM (Enero De 1986)

CAPILLA DEL MONTE, Córdoba, 18 (TELAM)

Un objeto volador no identificado de grandes dimensiones, cuyas evoluciones fueron observadas por espacio de una hora, descendió en la ladera de una de las lomas de la sierra del Pajarillo, a unos 12 kilómetros al noreste de Capilla del Monte. La nave luego de un tiempo no precisado, se elevó velozmente dejando la maleza totalmente quemada en un diámetro de 100 metros, según aseguró a Telam el secretario de Gobierno de la comuna local, Jorge Suárez. El fenómeno se produjo a las 23 del jueves último, ante la mirada de varios lugareños. Uno de ellos un chico de unos 8 ó 9 años, quien luego dibujó el extraño objeto, dándole forma circular, con numerosas ventanillas, despidiendo luces de colores brillantes que viraban entre el blanco, azul y naranja. Al trascender la insólita aparición, el intendente local, Diego Sez, acompañado por Suárez y el diputado provincial Heráclio Argañaraz (UCR), quien se encontraba de vacaciones en esa localidad serrana, se dirigieron al lugar, comprobando la veracidad de los dichos, en cuanto a la quemazón de maleza. Según relato de testigos, la evolución del objeto se produjo a unos dos kilómetros del camino que une Charbonier-Quebrada de Luna- Ongamira, a unos seis kilómetros a la derecha de la Ruta Nacional 38, cuyo cruce se encuentra a unos ocho kilómetros de Capilla del Monte. La zona se conoce como sierra del Pajarillo. Allí unos pocos lugareños -habitan la zona tres familias típicamente serranas- vieron que un inmenso “aparato” perdía altura y se mantenía por alrededor de una hora sobre una de las lomas, de vegetación muy baja y achaparrada, a unos dos kilómetros del lugar de observación. Luego de hacer evoluciones muy lentas, el objeto descendió aparentemente en la ladera opuesta y posteriormente se elevó velozmente para desaparecer en el firmamento. Desde su ubicación, los atónitos testigos notaron el incendio de la maleza y al llegar allí comprobaron que la misma estaba quemada en un diámetro casi perfecto de 100 metros. Asimismo, notaron que en otra loma vecina, dentro de un grupo de árboles típicos de la región se encontraba un sauce que -sin haberse quemado- había cambiado la coloración verde de su follaje tornándose rojizo y luego amarillento “como si le hubieran echado ácido”. El funcionario comunal, Jorge Suárez, confirmó a Telam que la maleza se encontraba quemada “de arriba hacia abajo, chamuscada, en un radio que medimos y nos dio entre 49 y 50 metros, por lo que resulta una circunferencia de 100 metros”. Luego agregó: “la gente del lugar no especula con estas cosas. Es muy tranquila, pero al abordar este tema se inquieta mucho. No es miedo, sólo temor a lo desconocido”.

martes, diciembre 27, 2011

Misterios en el Vaticano



por Enrique de Vicente

Una vieja sospecha

Para quien ha seguido las informaciones publicadas sobre este tema, aparentemente, la noticia sólo tenía de sorprendente el hecho de que estos familiares del Pontífice venían a sumarse al coro multitudinario que reclama se arroje luz sobre las confusas
circunstancias en que se produjo el inesperado fallecimiento.

Apenas transcurrido un mes desde la muerte, la prensa española anuncia la inminente presentación en Roma de Han asesinado al Papa (Operación Paloma), una novela en la que los periodistas Jesús Ramón Pena y Mario Eduardo Zottola sostienen que la muerte del Papa Lucíani «obedeció a un movimiento puramente económico», debido a que «el imperio financiero del Vaticano es uno de los más poderosos del mundo» y «existen poderosos motivos para intentar eliminar al máximo dirigente de esta fortuna». Sin embargo, a comienzos de aquel mismo mes, los tradicionalistas romanos seguidores del arzobispo Lefébvre ya avanzaron la posibilidad de que Juan Pablo I hubiese sido
asesinado por los masones infiltrados en las altas esferas vaticanas, a las que culpabilizaban de impulsar las tendencias reformistas postconciliares en la Iglesia, a las que supuestamente se opondría el Papa.

La Sotana Roja

Ciertas revistas de extrema derecha habían acusado de estar afiliados a la masonería al secretario de Estado de la Santa Sede, cardenal Villot, al presidente de la Congregación de Obispos, cardenal Baggio, al banquero del Vaticano, arzobispo Marcinkus y a otros prelados. En 1980, Bruce Marshali fantasea con el tema en su novela ¿Un asesino para Juan Pablo /?, en la que el Papa Lucíani es envenenado por la ficticia sociedad de Los Nuevos Apóstoles, cuyos doce miembros se oponen a los
cambios propulsados por el Concilio Vaticano II y apoyan como pontífice al cardenal Siri. Tres años después en La verdadera muerte de Juan Pablo I, Jean- Jacques Thierry plantea la hipótesis de que Villot sustituyó a Pablo VI por un sosías y planeó la muerte de su sucesor cuando éste descubrió la infiltración masónica en las esferas vaticanas, insólita teoría la del doble que aún hoy sostienen no
pocos ultraconservadores. De forma más seria y mejor documentada, Roger Peyrefitte, buen conocedor de los entresijos de la Masonería y del Vaticano, sostiene en La Sotana Roja la tesis de un complot tramado por algunos prelados que mantenían estrechas relaciones con mafiosos, financieros y dirigentes de la logia P-2, encubriendo bajo pseudónimos muy evidentes a personajes que a esas alturas eran ya bien conocidos. Y describe al Papa como un reformista liberal empeñado en erradicar
la corrupción de la cúpula eclesial, presentando a Villot y a Marcinkus como instigadores del crimen, llevado a cabo por un asesino profesional con una jeringuilla envenenada, a fin de evitar su inminente destitución. Ese mismo año, los fabricantes de best- séller G. Thomas y M. Morgan-Whitts publican Pontífice, una documentadísima investigación sobre las vidas de los tres últimos papas y las críticas circunstancias en que se desarrollan sus pontificados, en la que sugieren que la hipótesis del asesinato fue un rumor hábilmente promovido por el KGB soviético para desacreditar al Vaticano en unos momentos de gran tensión en sus relaciones con la URSS.

El Encubrimiento

En nombre de Dios La tesis de una conspiración urdida para asesinar a Lucíani con digitalina, a fin de impedir los cambios planteados por el Papa para acabar con la corrupción, es defendida en 1984 por David Yallop en su obra En nombre de Díos, resultado de tres años de intensas investigaciones en las que contó con la colaboración clandestina de algunos miembros de la curia vaticana. Yallop demuestra que el Vaticano encubrió las circunstancias en que se produjo el fallecimiento y
proporciona indicios suficientes para considerar necesaria la apertura de una investigación oficial. Su libro provocó un verdadero escándalo. La situación era realmente grave. Hasta el punto de llevar a un esoterista ultraconservador como Jean Parvulesco a aceptar la posibilidad de que Juan Pablo I fuese ejecutado para evitar que condujese a la Iglesia a una desviación teológico, progresista y tercermundista (se refiere al «sueño revolucionario y anarquista» que Yallop atribuye al Papa Lucíani), y a sostener a un tiempo que -aprovechando estas circunstancias- Yallop y «sus comandatarios sin rostro» pretenden presentar al Vaticano convertido en «la mayor potencia criminal del mundo».

El Presidente de la Comisión Pontificia para las Comunicaciones Sociales reaccionó al libro de Yallop remitiendo a las Nunciaturas Apostólicas y a algunas Conferencias Episcopales unos folios, elaborados por monseñor Nicolini, en los que se rebatía la hipótesis de que «el llorado» Juan Pablo I pretendiese «revolucionar» la jerarquía vaticana, explicando que «imaginar un ambiente propicio a conjuras es imposible para quien vive en la realidad cotidiana del Vaticano», añadiendo que «la salud del Papa era más bien enfermiza» y dejando claro que carece de importancia quién descubrió el
cadáver del Pontífice. Pese a todo, una encuesta publicada en 1987 demostraba que el 30 por ciento de los italianos estaban convencidos de que el Papa de la sonrisa murió asesinado. Un ladrón en la noche Conscientes de la necesidad de argumentos más contundentes, las autoridades vaticanas animaron a realizar una investigación imparcial sobre el asunto al periodista John Cornwell. Le dieron unas facilidades sin precedentes que le permitieron entrevistarse con los más importantes protagonistas de la historia que aún seguían vivos, sin imponerle condición alguna; todo ello -aclaracon la esperanza de que saldrían a la luz pruebas concluyentes de la falsedad de todas las teorías conspiratorias que durante te más de una década han sido causa de malestar para la Iglesia Católica Romana. En Como un ladrón en la noche, nos explica que, las pruebas comenzaron a llevarme a una conclusión que me parece más vergonzosa y más trágica que cualquiera de las conspiraciones propuestas hasta el presente: Le despreciaban por su torpe forma de andar, su aspecto desganado,
sus inocentes discursos, su lenguaje sencillo e imitaban el silbante tono de su voz. Se referían a él en tono condescendiente, con diminutivos. Había interminables historias sobre su comportamiento y sus meteduras de pata... Se dejó morir por no sentirse capacitado para ser Papa... Murió solo, en el centro de la comunidad cristiana más grande del mundo, por negligencia y por falta de amor, ridiculizado y
menospreciado por la institución que existía para mantenerle... Lo peor es que el propio Cornwell le presenta a veces como alguien poco menos que delirante y estima que «su mansedumbre, su desconfianza, sus preocupaciones por los temas puramente pastorales y piadosos, no se acoplaban bien a una Iglesia que se enfrentaba a los desafíos mundanales de los ochenta y los noventa». En similar sintonía, la de aceptar el mal menor, el historiador Ricardo de la Cierva asume en El diario
secreto de Juan Pablo I que existió una trama económica, amenazas de muerte, una conspiración para acabar con el Papa, un masón convertido que le facilita la lista de sus colegas infiltrados en la cúspide eclesiástica y le avisa que van a atacarle esa misma semana... pero, finalmente, muere por causa natural, antes de que intenten asesinarle. Puesto que se trata de una no- vela histórica, no hay forma de discernir en ella lo cierto de lo ficticio. Este libro, como el anterior, pretende tranquilizar no pocas conciencias atormentadas por la posibilidad de semejante crimen, al tiempo que incrementa la confusión en torno al tema. ¡Que se haga justicia! Y en estas circunstancias se encontraba la polémica cuando, a comienzos de 1991, las declaraciones de los familiares de Juan Pablo I vinieron a añadir leña a la caldera de las sospechas. Como si Dios, o el demonio, se empeñase en que los
trapos sucios del Vaticano siguieran siendo noticia, o bien en crear confusión en torno al tema que nos ocupa, una semana después la prensa anunciaba la próxima aparición de un libro explosivo.

La Muerte del Papa

El jesuita norteamericano Robert Graham, expone en el mismo los resultados de su amplia investigación sobre las tramas de espionaje -propias y ajenas- que se han tejido en torno a los secretos del Vaticano, y en las que han participado no pocos
religiosos. Lo que más me llamó la atención del asunto era que pocas semanas antes, a mediados de diciembre de 1990, una pequeña editorial había comenzado a distribuir el primer libro -que yo sepaen el que un sacerdote sustenta la tesis del asesinato: Se pedirá cuenta.

En opinión de su autor, el español Jesús López Sáez, licenciado en teología, filosofía y psicología, era necesario este libro, ya que el de Cornwell no sólo «no contentó al Vaticano sino que supera incluso la distorsión que ya se había hecho de la imagen de Albino Lucíani, y es necesario hacerle justicia». «El problema de la muerte de Juan Pablo I está ahí -explica- y se puede resolver, no encubriendo ni
reprimiendo el asunto, sino tratando de corazón comprenderlo. Abundan los indicios que justificarían una investigación en cualquier Estado de Derecho. Con ello no se ataca a la Iglesia; al contrario, se la defiende.

La clave evangélica es la purificación del templo, que es casa de oración y no debe convertirse en un mercado ni en cueva de bandidos. Evidentemente, lo que está en juego es muy grave: ¿Dónde ha habido más negocios? ¿En el mercado vaticano o en el viejo templo denunciado por Jesús? ¿No son demasiadas las muertes que han acompañado esos negocios? ¿Se ha hurtado a la Iglesia y al mundo la causa de la muerte de Juan Pablo I?... Si no se responde adecuadamente a estos interrogantes, la nueva evangelización quedará desacreditada como vieja comedia, desgraciada y estéril. Como dice el Señor en el Evangelio de Lucas: Se pedirá cuenta». Han matado a mi padre Ha hecho caso omiso a las prudentes recomendaciones de que no publicase su libro, consciente de que un artículo sobre el mismo tema, publicado en la revista religiosa Vida Nueva, le costó el cese como responsable de catequesis de adultos en el Secretariado Nacional. Casualmente, aquel articulo salió a la calle el 4 de octubre de 1984, aniversario del entierro del Papa, día en que -casualmente- en todas las iglesias del mundo se leía un salmo que en la Comunidad cristiana de la que ahora es responsable tenían especialmente asociado a la muerte de Juan Pablo I: «Han entrega- do el cadáver de tus siervos por comida a los pájaros del cielo, la carne de tus amigos a las bestias de la tierra... Que se conozca entre las gentes». Hablando con él, resulta evidente que profesa una admiración y un amor especial por la figura de Juan Pablo I. Cuando en la Comisión Episcopal le explicaron que, aunque fuera verdad, no debería decirse, añadiendo que, es como si tu padre fuera un criminal, debe quedar en familia, él replicó: «ese no es el caso; el caso es que han matado a mi padre y no tengo por qué callarlo».

Casualmente, el padre de Jesús López nació el mismo día que el Papa Lucíani: el 17 de octubre de 1912... Si de algo se le puede acusar es de exceso de amor y de celo, y no parecen ser estos motivos suficientes para que la jerarquía pueda condenar su atrevimiento, sino -por el contrario- para disculpar sus posibles excesos. Según nos explica, Jesús López visitó, en 1989, a Pía, la sobrina de Lucíani que junto a su padre Eduardo ha protagonizado las recientes declaraciones, y a la esposa de éste
último, Antonia, quien acabó confesándole: No sabemos de qué murió, y a veces tenemos
pensamientos extraños. Les entregó entonces copia de un borrador de su libro, y en diciembre de 1990, les envió el libro impreso. Resulta curioso que, tras doce años de silencio, precisamente ahora se animen a expresar sus dudas, aunque sea tímidamente. ¿Puede haber sido este sacerdote español el catalizador de esa reacción? Aunque así no fuese, hay demasiada sincronicidad entre ambos hechos como para ignorar que resultan significativos.

Pero veamos cuáles son los hechos en que se fundamenta la polémica.

¿Por qué no se hizo la autopsia?

El 29 de septiembre de 1978, el Vaticano comunicaba oficialmente que, hacia las 5.30 de esa mañana, «el secretario particular del Papa, no habiéndole encontrado en la capilla, como de costumbre, le ha encontrado muerto en la cama, con la luz encendida, como si aún leyera. El médico, Dr. R. Buzonetti, que acudió inmediatamente, ha constatado su muerte, acaecida probablemente hacia las 23 horas del día anterior a causa de un infarto agudo de miocardio». Las evidencias
acumuladas posteriormente demostraron que fue la hermana Vincenza quien descubrió el cadáver, al entrar en la habitación del Pontífice, desconcertada porque no obtuvo respuesta a sus insistentes llamadas. Según varios testigos, estaba sentado en la cama, con la luz encendida, las gafas puestas y unos papeles entre las manos. La monja corrió entonces a despertar al secretario John Magee, quien constató la muerte y llamó al cardenal Villot. Acompañado por el médico, éste último examinó el
cadáver y llamó a los embalsamadores. El problema es que las declaraciones que éstos hicieron posteriormente no coinciden con las realizadas por otros testigos. Dada la temperatura tibia que aún mantenía el cuerpo y que fue también comprobada por sor Vincenza y por el secretario Lorenzi, los embalsamadores estiman que el fallecimiento debió producirse entre las 4 y las 5, y no a las 11, conclusión que les fue confirmada por monseñor Noé. Pese a las protestas de algunos eclesiásticos,
el cardenal Oddi declaró que el Sacro Colegio Cardenalicio ni siquiera iba a considerar la posibilidad de abrir investigación alguna sobre la muerte, ni aceptaría el menor control por parte de nadie. Pero luego se supo que los cardenales pidieron conocer las circunstancias precisas en que aquella se produjo, ante los interrogantes que se planteaba la opinión pública, la ausencia de un boletín médico y
la negativa de la Santa Sede a realizar la autopsia del cadáver que eliminase cualquier duda. El problema es que, sin autopsia, resulta clínicamente imposible determinar que un deceso se produjo por infarto de miocardio agudo e instantáneo y que el cuadro típico del mismo no se corresponde con la disposición en la que se afirmó haber encontrado el cadáver, ya que todo parecía indicar que no hubo lucha con la muerte. Por otra parte, el sobrio estilo de vida del Papa y su tensión baja tampoco hacían sospechar semejante desenlace, ni tampoco se corresponden con una hemorragia cerebral o una embolia pulmonar, las otras posibilidades que han citado fuentes vaticanas. Para colmo, los médicos Buzonetti y Fontana, que firmaron el certificado de defunción, reconocieron no haber prestado nunca sus servicios médicos a Lucíani, por lo que no sabían nada sobre el estado de su salud ni sobre las medicinas que tomaba; tampoco se molestaro en preguntar a quienes podían
saberlo. Su muerte fue tan inesperada que el Dr. Da Ros, médico personal de Juan Pablo I, a quien había encontrado el día anterior con muy buena salud, no se lo podía creer. Una losa de silencio La Secretaría de Estado impuso un voto de silencio a sor Vincenza, para impedirle que contase lo que había visto, aunque finalmente lo rompió, ya que -en su opinión- «el mundo debe conocer la verdad» sobre la muerte de este Papa, al que ella admiraba profundamente. Como nos explica el padre López
Sáez, «parece que el Vaticano no quiere saber de qué murió el Papa, o no quiere que se sepa, y su versión oficial ha falseado la situación, dándose la ocultación y aún la represión de toda investigación sobre este enigma». Según uno de los especialistas a los que ha pedido estudiase las circunstancias en que se produjo la muerte, el Dr. Cabrera, «ésta podría responder mejor a una muerte provocada
por sustancia depresora y acaecida en profundo sueño». Por otra parte, el tono rosáceo que aún tenía su rostro a mediodía del 29 «aparece en algunas intoxicaciones, por ejemplo, de monóxido de carbono y de cianuro». Llama la atención -continúa el sacerdote español- la prisa de Villot por embalsamar el cadáver», procedimiento habitual cuando muere un Papa. Y ello pese a que, en
cualquier Estado de Derecho, sólo se puede proceder al embalsamamiento cuando han transcurrido 24 horas desde el fallecimiento, como ocurrió tras la muerte de Pablo VI. Contrariamente a lo que se ha dicho, las normas de la Santa Sede ni prohíben ni ordenan la autopsia de los pontífices, y mediante ésta -que Villot descartó obstinadamente- podría haberse determinado si hubo infarto agudo o detectado veneno de metales pesados, pero ésta quedaría seriamente dificultada tras el embalsamamiento. Aún en 1989 los habitantes del pueblo natal de Lucíani constituyeron un comité para pedir que se hiciese la autopsia que pese a los años transcurridos aún podría despejar algunas dudas. Sin embargo, pese a que se ha dicho que el cadáver fue embalsamado sin extraerle la sangre ni las vísceras, Lorenzi asegura que los embalsamadores «retiraron partes del cuerpo, posiblemente
las vísceras». En tal caso, pudo realizarse algún tipo de autopsia. Si así fue, ¿por qué no se ha dicho? El padre Gennari, asegura que tal autopsia se hizo, confirmando que las preocupaciones y el estrés llevaron al Papa a tomar inadvertidamente un vasodilatador, contraindicado para su tensión baja.

Pero, en tal caso, teniendo en cuenta que Lucíani era muy cuidadoso con sus medicamentos y que estos eran controlados por la enfermera sor Vincenza, cabe la posibilidad de un cambio criminal de las medicinas. En cuanto a la lectura que tenía entre sus manos cuando falleció, han circulado diversas versiones, sin que el Vaticano haya concretado de qué se trataba, incomprensiblemente. Según Germano Pattaro, consejero teológico del Pontífice, «eran unas notas sobre la conversación de dos horas que el Papa habla mantenido la tarde anterior con el Secretario de Estado Villot». Para entender los motivos por los que alguien podría estar interesado en acabar con la vida de Juan Pablo I, es necesario recordar brevemente toda una serie de turbias maniobras que salieron a la luz años después, que afectaban directamente a las finanzas vaticanas y que Lucíani alcanzó a conocer
parcialmente.

El Complot

El Banco Vaticano lava más blanco Según se desprende de las investigaciones realizadas por Yallop, Gurwin, Sisti, Modolo, Di Fonzo, Piazzesi, Bonsanti, Doménech y Rupert Cornweil, la mafia italonorteamericana utilizó las instituciones financieras del Vaticano para blanquear dinero sucio procedente del tráfico de drogas y otras actividades delictivas. Semejante operación fue concebida por
Michelle Sindona, que comienza su carrera reciclando la fortuna de los Gambino, conocidos hampones neoyorquinos, a través de un holding. Lentamente, va forjando un verdadero imperio financiero de dimensiones internacionales. Tras entregar al cardenal Montini, el dinero necesario para la construcción de un asilo, y que realmente fue donado por la CIA y la Mafia, se convierte en su amigo y consejero financiero. Por mediación de quien años despué se convertiría en el Papa Pablo
VI, conoce a Massimo Spada, director del Banco Vaticano. A través del Continental Bank of Illinois, la cuarta, parte de cuyas acciones han sido adquiridas por Sindona, se canalizarán cuantiosas inversiones vaticanas a lo largo del continente americano. Sindona traba una estrecha amistad con Licio Gelli, un poderoso empresario textil que ha combatido contra la República durante la guerra civil
española, alistándose luego en las SS nazis y trabajando finalmente como agente del KGB soviético para salvar el pellejo, actividad a la que pronto viene a sumarse la de agente de la CIA, al tiempo que se enriquece ayudando en su huida a Sudamérica a numerosos nazis como el famoso Klaus Barbie.

Acusado de haber torturado a partisanos, viaja a Argentina, donde entable amistad con el presidente Perón que le convierte en el primer agraciado con la doble nacionalidad italoargentina y le nombra consejero de su país en Italia. Teje toda una red de contactos en Iberoamérica, similar a la que elabora en Italia entre empresarios, políticos y militares. A partir de 1966, anima a muchos de estos a
ingresar en la agrupación P-2, a través de la cual Gamberini, Gran Maestre del Gran Oriente de Italia, pretende contar con un grupo de personajes eminentes que fuesen favorables y útiles a la Masonería, pero que pronto escapa a su control. El poder de convicción y la creciente influencia de Gelli - convertido ya en Gran Maestre de la Logia P-2- llevan a muchos a ingresar en ella convencidos de que les resultará de gran ayuda en sus carreras. Gelli se dedica a acumular secretos que le permiten
incrementar su poder y chantajear a otros para que se integren en su logia, convirtiéndose así en el epicentro donde confluyen las más confidenciales informaciones del país, gracias a las cuales manipula las más diversas instancias. Las amistades argentinas de Gelli Para centralizar sus actividades en Iberoamérica, Gelli compra una mansión en Montevideo, jactándose de ser amigo de poderosos hombres de negocios y de dirigentes derechistas de todo el continente. Contribuye al
retorno de Perón, en 1973 asiste como invitado de honor a la inauguración de su presidencia y Andreotti comenta, asombrado, el respeto reverencial que el general le profesaba, asegurando que vio cómo Perón se arrodillaba ante Gelli. Su influencia en Argentina estuvo asegurada sucesivamente por el ministro-ocultista López Rega, y - tras el golpe militar- por el General Suárez Masón y por el Almirante Massera, ligados a los escuadrones de la muerte y miembros de la P-2. Junto a ellos, Gelli
hace suculentos negocios, comprando principalmente petróleo y armas. Gelli y Sindona se introducen en las más altas esferas vaticanas de la mano de Umberto Ortolani, abogado y Gentilhombre de Su Santidad, que se convertirá en el lugarteniente de Gelli dentro de la P-2, conociendo así a monseñor Paul Marcinkus. Hijo de lituanos y criado en Chicago, en 1963 éste se había convertido en el corpulento guardaespaldas e intérprete predilecto de Pablo VI, salvando su vida en Manila y ganándose su plena confianza. Cuando es encargado de dirigir el Instituto para las Obras de Religión
(IQR), aparato financiero del Vaticano, el obispo Marcinkus utiliza los consejos y la red bancaria internacional de Sindona para invertir buena parte de la fortuna del Vaticano, al tiempo que Sindona utiliza la estructura bancaria de la Santa Sede para evadir impuestos y blanquear el dinero de la Mafia y Gelli garantiza la cobertura política de las operaciones. Los escándalos financieros En 1973 Sindona se ha convertido en el banquero más importante del país. El primer ministro le saluda como el salvador de la lira y el embajador norteamericano le califica el hombre del año. Pero la crisis del petróleo, sus operaciones especulativas y los rumores sobre sus relaciones con la Mafia contribuyen a que su imperio se derrumbe en menos de un año. Sindona huye a Estados Unidos y el Vaticano pierde una cifra considerable en la operación, hecho desmentido por Marcinkus, quien niega conocer a Sindona. Roberto Calvi, que conoció a Pablo VI cuando era arzobispo de Milán, trabó relación con
Sindona -probablemente por intermedio de Spada y Marcinkus- cuando era subdirector general del Banco Ambrosiano. Había razones sobradas para este encuentro: el IOR era propietario de buena parte de las acciones del Ambrosiano y de la mitad del Finanbank, uno de los bancos suizos de Sindona. Gracias a estos apoyos en 1971 Calvi se convierte en presidente del banco y no tardará en ser tesorero de la P-2. Tras el crack Sindona, el IOR encarga a Calvi de sus inversiones en el extranjero, prestando su nombre para que éste compre la mitad de las acciones de la Banca Mercantile florentina y Marcinkus forma parte de la directiva de la sucursal en Bahamas del
Ambrosiano. Gelli viaja a Nueva York, donde Sindona había sido detenido acusado de fraude y testifica que su amigo era víctima inocente de una intriga comunista. Allí, Sindona le presenta a Phil Guarino, director de la campaña electoral de Reagan, a cuya inauguración presidencial le invitará.

En 1977 Sindona le re- cuerda que considera propios la mitad de sus negocios. Dado que éste no cumple su promesa de enviarle dinero, dos meses después ordena empapelar el centro de Milán con llamativos carteles que denuncian a Calvi como estafador, defraudador y traficante de divisas, y finalmente hace llegar al gobernador del Banco de Italia una carta que acorralará definitivamente a Calvi. En 1979 Sindona renueva sus ataques contra Calvi y el Banco de Italia inicia una investigación
sobre esta entidad. En nombre del dividendo En medio de tales problemas, en agosto muere Pablo VI y los cardenales no tardan en elegir sucesor suyo al patriarca veneciano Albino Lucíani. Este Pontífice tan popular trae aires decididamente renovadores. Y había demostrado ya su firmeza ante dos escándalos económicos, uno de ellos relacionado con la venta de la Banca Católica del Véneto a Calvi, por parte de Marcinkus en 1972. Tras la operación, este banco cesó de hacer préstamos a bajo
interés con los que había favorecido a los menos privilegiados. A petición de sus obispos, Luciani comenzó a investigar, no pudiendo dar crédito a lo que descubrió sobre Calvi y Sindona. Cuando le comentó el problema a Benelli, sustituto de la Secretaría de Estado, éste le explicó que sabía se trataba de una más de las operaciones financieras urdidas por los banqueros y Marcinkus para evadir
impuestos y especular ilegalmente. Lucíani comentó: ¿Qué tiene que ver todo esto con la Iglesia de los pobres? En nombre de Díos. Y Benelli le replicó: «No. En nombre del dividendo». Así que Juan Pablo I sabe a qué atenerse. Encarga al cardenal Villot la inspección financiera del IOR. Entretanto, Calvi ha comenzado a desprenderse de todas sus acciones, cuando se entera de que el Papa ha decidido reemplazar a Marcinkus e intentar devolver a la Iglesia a una situación de pobreza evangélica. Se asegura que el 12 de septiembre el Papa tiene en su poder una lista con los nombres
de 121 funcionarios del Vaticano que presuntamente pertenecen a la masonería, entre los que figurarían Villot, Casaroli y Marcinkus. El día 13 llama urgentemente a G. Pattaro como consejero, confesándole su desconcierto ante las relaciones de enfrentamiento entre los miembros de la curia.

Marcinkus, jurará a Cornweil que ni él ni nadie del Vaticano es masón, lo que se contradice con muchas investigaciones. Tras la única audiencia que mantiene con el Papa, comenta a sus ayudantes: «¡Qué barbaridad! ¡Parece agotado!» Es peligroso expulsar a los mercaderes del templo Según diversos testimonios, el Papa se propone sustituir a Villot por Benelli -gran adversario de Marcinkus- como secretario de Estado, entre otros cambios. En la tarde del 28 tiene una larga conversación con Villot en la que le comunica su decisión de realizar importantes cambios y de poner fin a las relaciones entre el IOF y el Ambrosiano. Esa misma noche, Lucíani fallece. Alguno de los que estaban informados del nuevo rumbo planeado por el Papa pudo informar de ello a Calvi o a Gelli. Y alguien que tuviese acceso a la habitación de Lucíani pudo provocar su muerte. Se conocen unos cuantos casos de pontífices que murieron envenenados. Y tenemos además la lista de los atentados con la P-2 y de muertes relacionadas con la quiebra del Ambrosiano. El padre López Sáez ha
expuesto de forma sumamente clara y sintética las más destacadas evidencias que le llevan a sostener la tesis de que se trató de una muerte provocada, y que hasta ahora el Vaticano no ha acertado a refutar con precisión. Por el contrario, además de que muchas de las relaciones delictivas del IOR están más que bien fundamentadas, su entrega de más de 240 millones de dólares a bancos acreedores de todo el mundo, por sus responsabilidades relacionadas con la quiebra del Ambrosiano, demuestran los intereses comunes de ambas entidades. La extraña caída de la logia P-2 En sus
recientes declaraciones, Eduardo Lucíani, hermano del Papa, ha explicado la extraña forma en que Juan Pablo I se despidió de él, tres días antes de su muerte: Nunca nos habíamos besado ni abrazado, pero aquella tarde quiso besarme y me abrazó con fuerza. Le pregunté si estaba bien y me dijo que sí. Pero yo me fui con un misterioso presentimiento. Eduardo añadió que en sus encuentros con el pontífice, nunca se refirió a los problemas de IOR, pero antes de ser elegido Papa le confesó:
«Por desgracia, hasta los bancos fundados por católicos, que deberían disponer de gente de confianza, se apoyan en personas que de católicas no tienen ni el nombre». Procesado por 65 delitos cometidos en Estados Unidos, Sindona es encarcelado en marzo de 1980, concediéndose su extradición a Italia donde fue condenado a cadena perpetua por la muerte del fiscal encargado de investigar la quiebra de sus bancos. A los dos días de estar encerrado en una cárcel de máxima seguridad, sufre un extraño ataque descrito como infarto o derrame cerebral, pero que parece fue
producido por cianuro, falleciendo. Ortolani, acusado de participar en la quiebra fraudulenta del Ambrosiano, permanece varios años refugiado en Suramérica, antes de regresar a Italia, donde es procesado.

Logrando Entender

En marzo de 1981, la policía italiana intenta detener a Gelli como implicado en la fuga de Sindona, pero éste ha desaparecido de su villa residencial, donde encuentran los archivos de la P-2. Entre sus 953 miembros descubren a muchas de las personalidades más poderosas de Italia, como Andreotti y otros ex primeros ministros, 3 ministros en activo, 90 jueces, 43 parlamentarios, líderes de todos los
partidos a excepción del comunista, banqueros, propietarios y directores de diarios, 183 oficiales de los tres ejércitos, incluido el comandante de las Fuerzas Armadas y 2 directores de los servicios de inteligencia. La estrategia de la tensión Cuando la prensa la descubre, se inicia una crisis que culmina con la caída del gobierno de coalición encabezado por Foriani, muchos de cuyos colaboradores eran miembros de la P-2. Como uno de los acusadores explicará, la Logia P-2 «combinó política y negocios
con la intención de destruir el ordenamiento constitucional del país». Se refería a las implicaciones de la P-2 en atentados terroristas que crearon en Italia una estrategia de la tensión que la predispuso a varias tentativas de golpe de Estado, en las que participó la Logia, a la par que fomentaba el temor de diversas instancias a que los comunistas llegasen al poder, dentro de un mare mágnum de extrañas relaciones que CIA, Mafia y Masonería mantuvieron en Italia desde la Segunda Guerra Mundial y a las que no fueron ajenas altas personalidades vaticanas. En julio, la hija de Gelli viaja a Italia sin encubrir su identidad, siendo detenida en el aeropuerto y encontrándose en un doble fondo de su equipaje una serie de documentos relativos a la P-2, uno de los cuales es descrito como un informe secreto de la CIA falsificado que se refería a intentos de subvertir a Europa occidental y a Italia en particular.

Resulta impensable que, tras haber sido sacados del país, semejantes documentos se pongan al alcance de la policía, a no ser que tras semejante maniobra se esconda una intención oculta. Ya el periodista P. Hebbiethhwaite se había extrañado de que en los archivos de Gelli no hubiese nombres de comunistas italianos ni de otros países, resultando complejo entender cómo sin tales intermediarios había realizado buenos negocios con países del Este y entablado amistad con el dictador Ceaucescu,
sospechando que tales nombres podrían haber sido eliminados por el propio Gelli que habría dejado todo aquel material dispuesto para ser encontrado, en lugar de haberlo destruido. Stephen Knight, un investigador imparcial que ha denunciado la infiltración del KGB en la masonería británica, recuerda que Gelli trabajó para la inteligencia soviética y sostiene que, la P-2 fue un programa patrocinado por
la KGB para desestabilizar Italia y llevar a los comunistas al poder por primera vez en un país occidental. Esto explicaría en su opinión por qué se encontraba entre sus archivos un documento en el que se describe la estructura de¡ KGB, aunque no se pregunta por qué lo dejó tras él, así como las motivaciones ocultas del escándalo de la P-2 y su conexión con el atentado que sufrió Juan Pablo II el 13 de mayo de 1981, poco después de descubrirse los documentos de la Logia. Pero esa es otra historia y las claves de todo el embrollo podrían encontrarse en otro nivel: el de los oscuros designios de las fuerzas que rigen la extraña dialéctica del ajedrez planetario, situándose «más allá del bien y del mal», como veremos en otra ocasión. Un viaje sin retorno El 20 de ese mismo mes, Calvi es detenido por la quiebra del Banco Ambrosiano, ejerciendo una enorme presión sobre Marcinkus y Menini, directivos del IOR, para que acudan en su ayuda, comunicando a su esposa y a su hija que las operaciones anómalas por las que iban a procesarle habían sido realizadas en representación de esta institución bancaria del Vaticano, según constaba en documentos guardados en la Banca suiza del Gottardo.

Un año después de ser condenado y puesto en libertad bajo fianza, Calvi vuela a Londres. Hay quien sospecha que busca ayuda en una Logia de Londres, a la que decía pertenecer y a la que atribula poderosas influencias financieras. Sea corno fuere, su cadáver es hallado colgado de un puente londinense, con los bolsillos repletos de piedras. Un tribunal de Milán sostendrá que fue asesinado, mientras su viuda asegura que «fue víctima de feroces luchas vaticanas», y recuerda que, cuando Gelli llamaba a Calvi para chantajearle y le preguntaban quien era, desde 1978 siempre respondía:
Lucíani, el apellido del Papa muerto ese año. Cuando Yallop intentó entrevistarle por teléfono para su libro sobre la vida de Juan Pablo I, Calvi le respondió malhumorado: «¿Quién te ha mandado contra mí? Yo siempre pago. ¿De qué conoce a Gelli? ¿Cuánto quiere? No escriba ese libro. No me vuelva a llamar nunca». Implicado en la quiebra del Ambrosiano, Gelli es encarcelado en 1982 en una prisión de máxima seguridad, de la que escapa un año después. En 1986 el Tribunal Supremo le implica en
la brutal matanza de Bolonia, llevada a cabo por elementos ultraderechistas con el conocimiento de servicios de inteligencia controlados por él, y de la que intentó culpabilizar a los servicios secretos búlgaros y soviéticos, como en el atentado contra el Papa Wojtila. Extraditado por sus delitos financieros, pasó una corta temporada en la cárcel, concediéndosela la libertad provisional por motivos de salud. Un trabajo del Espíritu Santo Contrasta la imagen que de Juan Pablo I se ha
querido dar en ciertas esferas vaticanas con la que de él ha retenido el pueblo llano. Un anónimo monseñor confiesa a Cornweil: «El Espíritu Santo hizo un buen trabajo, librándonos de él antes de que hiciera demasiado daño». Don Diego Lorenzi, uno de sus secretarios, le confirma: «Les hubiera gustado cambiarle. No le merecíamos». «Ese Papa consiguió un enorme afecto popular de la gente corriente -opina el padre Farusi, director del informativo de Radio Vaticana-. Se le creía aún más popular que a Juan XXIII, era incluso más santo, más humilde, más modesto, más sencillo. Se pensaba de él que era un Papa santo, cercano a su gente». Está claro que un Papa así tenía que resultar incómodo para muchos en un ambiente que ha cambiado la humildad, la caridad y el amor por la púrpura, el protocolo y la burocracia. Su reino no era de ese mundo y ese mundo le despreció.

http://www.formarse.com.ar/conspiraciones/MISTERIOS%20EN%20EL%20VATICANO.HTM (10 of 10)19/03/2005 9:57:23